La Relevancia de las Normas de Desempeño de la IFC en el Contexto Empresarial Global  

La Relevancia de las Normas de Desempeño de la IFC en el Contexto Empresarial Global  

Es cada vez más importante para los inversionistas internacionales que los proyectos que financian tengan resuelto el riesgo de incumplimientos ambientales, y para ello normas de desempeño como la de la Corporación Financiera Internacional (IFC) permiten generar un marco general que respondan a mitigar y reparar los riesgos e impactos sociales y ambientales negativos que podría traer la ejecución del proyecto.   

Las Normas de Desempeño de la IFC se introdujeron en 2006 y actualizaron en 2012, como respuesta a la preocupación de los inversores por los impactos adversos de los proyectos económicos en el medio ambiente y las comunidades locales. Cada norma aborda aspectos clave, desde la gestión de riesgos hasta la conservación de la biodiversidad y la protección de los derechos humanos.  

Sectores Clave y la Implementación de las Normas  

Las Normas de Desempeño se aplican a una amplia gama de sectores, incluyendo energía, minería, infraestructura, agricultura, y servicios financieros. Según lo declara en su Política sobre Sostenibilidad Ambiental y Social (Corporación Financiera Internacional, 2012, estas actividades pueden ser tanto inversiones financiadas directamente por la IFC; inversiones ejecutadas a través de intermediarios financieros o administradas por su firma de administración de activos o cualquier otra de sus subsidiarias; o inversiones financiadas en forma total o parcial por donantes. 

Los proyectos que involucran la adquisición de tierras, como los grandes desarrollos de infraestructura, están sujetos a la Norma de Desempeño 5, que garantiza la compensación justa y la restauración de los medios de subsistencia de las personas desplazadas.  La Norma de Desempeño 6, por otro lado, se enfoca en la conservación de la biodiversidad, vital en sectores como la silvicultura y la pesca. Las empresas que gestionan recursos naturales vivos deben seguir prácticas sostenibles, y se les anima a obtener certificaciones independientes para demostrar su compromiso.  

¿Cómo se implementan las debidas diligencias socio-ambientales de IFC? 

Habitualmente, las entidades financieras y las organizaciones interesadas en obtener financiamiento se apoyan en organizaciones evaluadoras expertas en los temas sociales y ambientales. Este es el caso de CEGESTI en América Latina, quien actúa en relación con diversas entidades financieras europeas.  

La figura 1 esquematiza la relación de las partes. 

Una debida diligencia socioambiental para la IFC se divide en 4 pasos, los cuáles detallaremos a continuación, basándonos en el estudio de CEGESTI ¿Qué son, cómo se implementan y qué evalúan las debidas diligencias socio-ambientales de IFC previo a otorgar financiamiento?. 

  1. Elaboración del plan: En esta primera etapa se trabaja de manera conjunta entre el inversionista, el evaluado y los evaluadores designados.  Se organiza la agenda de evaluación, identificando las contrapartes de la organización evaluada, los evaluadores y sus respectivas responsabilidades. Se definen los requisitos o criterios que se verificarán, además de los aspectos logísticos necesarios. También se incluye la selección de muestras geográficas, así como de personas u otros actores a ser considerados en la investigación. 
  1. Ejecución de la evaluación: La evaluación se realiza tanto de manera remota como presencial. A distancia, se lleva a cabo una investigación preliminar de la organización, acompañada de una revisión documental de su gestión y prácticas, que luego se profundiza durante la visita en el sitio. En el lugar, se realizan recorridos, análisis de documentos e incluso entrevistas tanto dentro de la organización como con actores externos. Estas entrevistas pueden incluir a comunidades, entidades gubernamentales, proveedores, organizaciones de la sociedad civil, trabajadores, entre otros. 
  1. Elaboración del informe y plan de acción: Con las actividades anteriores finalizadas, los evaluadores preparan un informe que resume  los hallazgos (sean positivos o no) y detalla el plan de acción socio-ambiental que debe implementarse. También se adjunta toda la evidencia relacionada con los hallazgos. 
  1. Seguimiento del plan de acción: Una vez que se acuerda el plan de acción entre las partes, es necesario llevar a cabo un seguimiento de la debida diligencia para que el inversionista tenga plena confianza en que la empresa está cumpliendo con lo establecido. Si es necesario, se proponen medidas adicionales de corrección y mejora. 

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